viernes, 17 de mayo de 2013

Principales Iglesias del Centro Histórico


CATEDRAL;  El Sagrario fue elegida como la primera parroquia de la recién fundada ciudad de Santiago en las primeras décadas del siglo XVI, cuando apenas se iniciaba la evangelización de nuestras tierras. Quedó adscrita a la Catedral de Santiago, teniendo como sede la Capilla del Santísimo Sacramento. En ese mismo siglo se erigió la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios y, posteriormente, la parroquia de San Sebastián. Estas parroquias, llamadas rectorales, fueron las primeras y, junto con la parroquia de Nuestra Señora de Candelaria, fueron las 4 parroquias de la ciudad de Santiago y, por tanto, fueron trasladadas al Valle de la Virgen después de los terremotos de 1773. 

La parroquia siempre ha estado adscrita a la Catedral de Santiago, teniendo como sede la Capilla del Santísimo Sacramento. Dicha capilla fue construída en el Valle de Panchoy durante el obispado del Ilmo. Sr. Dn. Agustín de Ugarte y Saravia y  estrenada con toda magnificencia el 15 de septiembre del año 1639.   








Siendo la primera parroquia de la ciudad de Santiago, El Sagrario siempre tuvo un lugar importante por ser la parroquia central de la ciudad y, después del cambio de asentamiento de la ciudad, pasó a ocupar similar posición en la Nueva Guatemala Siendo la primera parroquia de la ciudad de Santiago, de bautismo de personajes muy ilustres de la historia patria. Las partidas de los libros de matrimonios ayudan, ciertamente, a conocer a los habitantes de la ciudad y el desarrollo de sus familias. Toda la historia de la nueva capital está entrelazada a la de esta parroquia.  En cuanto a sus responsables, se puede decir que los señores obispos y arzobispos de Guatemala delegaron al Cabildo Metropolitano de la Catedral muchas de las actividades para la construcción, embellecimiento, remozamiento y reparación del edificio de la Catedral; asimismo, para la adecuada administración y desarrollo de la liturgia y el canto en el templo a través del sacristán mayor del templo.



 Ya a mediados del siglo XX, se va viendo la necesidad de tener nuevas parroquias, especialmente a partir de las décadas de 1950 y 60, cuando no sólo la ciudad va creciendo en población y tamaño, sino que también se cuenta ya con religiosos que van retornando a Guatemala después de los regímenes liberales. Así pues, se erigen nuevas parroquias y algunas de ellas van abarcando el territorio de El Sagrario. A la vez, el frenético crecimiento de la ciudad a partir de la década de los 70 ha hecho que la gran urbe metropolitana requiera muchas parroquias más, que atiendan las diversas áreas de desarrollo. Este crecimiento ha hecho que la ciudad de Guatemala se haya prácticamente integrado a otros municipios cercanos, como Villa Nueva y Mixco, lugares donde viven actualmente miles de personas. Las parroquias en el centro de la ciudad, en cambio, han ido quedando en sectores poco habitados, más aptos para el comercio que para la vivienda y por tanto se han ido convirtiendo en centros de peregrinación y en templos visitados, en buena parte, debido a situaciones de orden devocional, ligadas a la presencia de alguna imagen de devoción o de una orden religiosa que promueve determinada devoción. Esta es la principal razón por la cual la primera y principal parroquia de la ciudad ha ido quedándose sin mucha feligresía propia y realiza más bien una actividad de santuario.


NUESTRA SEÑORA DE CANDELARIA

Hablar de Jesús de candelaria es hilvanar historia y leyenda, es hablar de una tradición de fe que se vive en Guatemala desde hace más de 400 años. 


Jesús de candelaria identifica nuestra nacionalidad criolla, nuestra religiosidad popular, nuestra historia, nuestro catolicismo.
Muchos han sido los intentos por ubicar a la consagrada imagen de Jesús de candelaria, a través de las distintas épocas, siempre durante el periodo colonial, pero muy variadas en cuanto a las teorías que diversos historiadores han manejado. Una de las más recientes, basándose en los libros de inventarios existentes, propone a Juan de Chávez como su autor en el año de 1825.

 Pero otros datos históricos rápidamente echan por tierra tal pensamiento. El Arzobispo e historiador Francisco de Paula García sugiere a Mateo de Zúñiga, de quién sí se sabe hizo a Jesús de la Merced, como el escultor de Jesús de Candelaria por el año de 1640. 











BEATAS DE BELÉN
Descripción General

Actualmente solamente se conserva una pequeña iglesia de lo que antes fue el Monasterio de las Beatas de Belén. Tanto la iglesia como el convento se construyeron para los años de la fundación de la ciudad. Fue uno de los primeros templos en ser cerrados durante el gobierno del general Justo Rufino Barrios. En 1873 fue expulsada su congregación. Años después la iglesia fue abierta, pero sus terrenos fueron expropiados por las autoridades liberales. En 1944 la iglesia fue entregada a la congregación de padres Maryknoll, para que atendieran a los residentes norteamericanos católicos de Guatemala.